lunes, 2 de julio de 2012

La locura de las rebajas

30 de junio...nervios...impaciencia... sudoración...alarma en mano...protecciones...tarjeta preparada...
1 de julio... ¡tonto el último!

¿Quien no a visto en las noticias gente esperando en la puerta de un comercio antes de la hora para ser el primero en llegar? ¿Quien no ha pasado por una tienda en la que antes hubiera azotado un torbellino humano? 
Si, han llegado las rebajas.

¿Pero que se esconde realmente detrás de estos superdescuentos?

FACUA-Consumidores en Acción advierte que la gran mayoría de autoridades autonómicas de protección al consumidor pasan por alto los fraudes en rebajas al no hacer seguimientos de precios antes de su inicio para poder detectar descuentos falsos.

Existen establecimientos que pueden vulnerar los derechos de los consumidores e incurrir en competencia desleal falseando las rebajas, al presentar como rebajados productos que no habían estado antes a la venta o manipulando el etiquetado para hacer creer que su precio original era superior al real. Es decir, solo basta con poner la etiqueta blanca de un color amarillo chillón, y el precio normal se transforma en un precio más apetecible.

Por ejemplo, visto con mis propios ojos, podéis fijaros en El Corte Inglés (en cualquiera de sus continuas campañas:la semana fantástica, los 14 días del dia de la madre, los 21 días de primavera...), si el producto ha sido rebajado constará el precio anterior marcado... pero sospechar si en la etiqueta "llamativa" solo marca un precio, ese producto se lleva todas las papeletas de ser "un falso producto rebajado". Podéis preguntar cuanto valía antes y observar el comportamiento del dependiente...

Asimismo, la asociación advierte que en el segundo mes de las rebajas numerosos establecimientos siguen anunciándolas pese a que ya tienen muy pocos productos rebajados. La normativa establece que para poder anunciarlas, al menos la mitad de los productos a la venta deben estar rebajados.

Algunos consejos a seguir:

- valorar la necesidad real de la adquisición de los productos, su calidad y precio actual por encima de la sensación de ahorro que pueda representarles el porcentaje de descuento.
- Acudir antes del comienzo de las rebajas al establecimiento, ver que nos gusta, apuntar precios, y una vez en rebajas comparar.
- antes de pagar, solicitar información sobre la admisión de devoluciones por cambio de talla u otra circunstancia no achacable al establecimiento ni al fabricante. En cualquier caso, si el artículo está defectuoso, el comerciante está obligado a cambiarlo.

Cosas que el consumidor debe saber:

- Los artículos rebajados tienen que haber estado como mínimo a la venta durante un mes antes.
- En el objeto que se compre, se tiene que ver claramente el precio orginal y el precio rebajado.
- Examinar los productos ya que tienen que tener la misma calidad y garantía que tiene a precio no rebajado.
- Se tiene derecho a la devolución del importe satisfecho, a la reparación o a la sustitución de los mismos.
- Si los comercios admiten habitualmente el pago con tarjetas de crédito, en épocas de rebajas tienen que aceptarlo igualmente.




Fuente: facua.org

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